sábado, 23 de agosto de 2014







Este vídeo es una obra maestra, y Sigur Rós uno de mis grupos favoritos. Te transporta, es mágico. 






Desahogos Momentáneos

Hoy me duele todo. Tanto dentro como por fuera. Y sé que no es justo, no debería quejarme de cosas tan pasajeras, tan poco ''hirientes'', quedan muy pequeñas al lado de las atrocidades y horrores que se sufren en el mundo a diario. Y aún odiándome por ser tan egoísta no puedo evitar sentirme la mayor de las sufridoras. Si es cierto, que cada persona es su felicidad y su dolor, y que cada persona siente e interpreta lo que le rodea con diferentes niveles de intensidad, y por lo tanto, cada persona se desahoga peculiarmente. El caso es que mi cuerpo pide desahogo, lo pide a gritos. Y me lo merezco, porque soy humana, aunque no creo que ser humana sea una virtud, pero esta vez tiene sus ventajas. Adoro desahogarme, a veces busco el sufrimiento en cualquier parte, solo para poder hacerlo. Incluso, suelo ir guardándome todo para explotar y salpicar lo que me rodea de un cúmulo de llantos, heridas, errores, rechazos ajenos y propios, pasos en falso, melancolías, ilusiones rotas y otro tipo de mierdeces típicas del ser humano.  Pero joder, esa soy yo, y no hay nada más autentico que ser fiel a uno mismo, poder liberarse, cerrar los ojos tan fuerte que puedas vivir en tus pensamientos, tener algo en lo que creer y mil cosas en las que dudar y con las que soñar, pero tenerte, mirar dentro, muy dentro de ti, y continuar, siempre continuar.

miércoles, 20 de agosto de 2014

Hovik





Mama, creo que estoy profundamente enamorada...olvida el ''creo''

Guillermo Fadanelli

''Aunque tal vez sea la única, poseo una enorme ventaja sobre la mayoría de los hombres: a mí si me gustan las mujeres con celulitis, adoro tocar y besar sus tejidos destrozados, sus pieles arenosas cruzadas por ríos blancos (Carajo, el modo de expresarme de la celulitis es una prueba de que en realidad me gusta). Naturalmente que en eso que para muchos es un defecto o una enfermedad radica gran parte del ser femenino, para la mayoría de los moralistas del sexo una mujer con celulitis equivale a lo que hace unas décadas todavía significaba una mujer con el himen roto, apenas la descubren se escandalizan, o si no al menos se decepcionan: la mujer ha sido tocada por la mano lujuriosa de la naturaleza.
Si pudiera escoger pediría que todas las mujeres que en el futuro habrán de compartir mi cama tuvieran al menos una de esas bellas ramificaciones blancas, tan parecidas a los cauces de un río o a las líneas de una mano afortunada, de no ser así rehusaría a acostarme con ellas.Saber apreciar la celulitis no es fácil, una piel de 35 años surcada por esas hermosas líneas blancas podría ser algo tan refinado como acompañar un Roquefort con un Suternes, pero carajo, educar al pueblo es tan difícil, sobre todo cuando posee vicios tan arraigados. No seré yo quien logre enderezar su camino.''